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El escándalo de Botnia y su fábrica de celulosa

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El escándalo de Botnia y su fábrica de celulosa Empty El escándalo de Botnia y su fábrica de celulosa

Mensaje  dayrdan Sáb Ago 09, 2008 2:45 pm

El escándalo de Botnia y su fábrica de celulosa

A pesar de la existencia de leyes que ofrecen generosas exoneraciones fiscales y estímulos para determinadas inversiones, el Grupo Botnia presionó al gobierno uruguayo para que firmara un Tratado específico con el Estado de Finlandia. Es la primera vez que una multinacional exige algo así.

Miguel Cabrera

Un monstruo grande y pisa fuerte
El Grupo Botnia de Finlandia comienza la instalación de una inmensa fábrica de celulosa a 4 km de la ciudad de Fray Bentos. Producirá al año 1.000.000 de toneladas de celulosa, que exportará a Europa (50 a 55%). China (30 a 35%) y el resto a EE.UU. Tiene cinco plantas de celulosa en Finlandia y otras en otros países, uno de ellos Chile. Aproximadamente el 80% de su producción de celulosa se vende a fábricas de papel, propiedad del mismo grupo empresarial. Esta producción hará que Botnia consuma anualmente 3.500.000 metros cúbicos de madera.[11]
Este monstruo sacará cada día 86 millones de litros de agua del Río Uruguay y un 80% de este volumen lo volcará de nuevo al río pero ahora a elevada temperatura y “con una carga de contaminantes diversos que afectarán mortalmente la biología del río y el conjunto del ecosistema, las usinas potabilizadoras de agua para consumo humano y los usos diversos del recurso para las poblaciones asentadas en las márgenes (Fray Bentos, Las Cañas, Gualeguaychú, Nueva Palmira, Carmelo, Colonia), también los usos agrícolas del agua para el riego de cultivos y el suministro de agua a los ganados, etc.”[3] Serán “200 toneladas anuales de nitrógeno” y “20 toneladas de fósforo” las que verterá el monstruo en el Río Uruguay. Por si esto fuera poco, la planta enviará diariamente a la atmósfera, según las propias cifras de la empresa, “14 millones de metros cúbicos de gases promotores del efecto invernadero”.[2]
La planta modelo de celulosa Arauco, utilizando el mismo tipo de tecnología finlandesa que el grupo empresarial Botnia, acaba de ser suspendida por el gobierno chileno debido a su alto nivel de polución. Había comenzado a operar en febrero 2004. Con tecnología de punta, una inversión de mil millones de dólares, y sometida a un Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental A pesar de todas estas garantías no pudo evitarse “un derrame de sulfato que afectó a habitantes ubicados a 30 km de distancia, provocándoles dolores de cabeza, náuseas e irritación en los ojos.” Pudo constatarse que “vierte 900 litros de residuos (tóxicos) por segundo en el Río Cruces; sus olores nauseabundos llegan hasta la ciudad de Valdivia (a unos 50 km de distancia); y los animales domésticos que beben las aguas del río de los pozos cercanos, mueren”.[13] En el caso de Botnia, la misma empresa reconoce como inevitable
Exigencia de Botnia: aceptación por Uruguay de un Acuerdo humillante con el Estado de Finlandia
A pesar de la existencia de leyes de inversiones que ofrecen generosas exoneraciones fiscales y estímulos para determinadas inversiones, el Grupo Botnia presionó al gobierno uruguayo para que firmara un Tratado específico con el Estado de Finlandia. Es la primera vez que una multinacional condiciona su presencia a la aceptación previa de un Tratado de Estado a Estado. El texto enviado por el Poder Ejecutivo al Parlamento el 21-03-02 fue aprobado por el Senado el 15-10-03 y el 4-05-04 por Diputados. Se opuso toda la bancada del Frente Amplio.
El texto del acuerdo, según el diputado Ricardo Castromán [5] no deja dudas: “No le da muchas salvaguardas, le da todas las salvaguardas. Se habla de compensaciones, se habla de que si se concreta la construcción de la planta de celulosa por parte de Botnia, que pertenece al Estado finlandés, esa va a ser tierra finlandesa donde nadie va a tocar nada ni revisar nada”. “El Tratado y fundamentalmente los artículos 5 y 9, están dándole todos tipo de prebendas al Estado finlandés y a este empresa que piensa instalarse y de esta forma nos parece que estamos en condiciones prácticamente insalvables en este momento”. El periodista José Irazábal le plantea a continuación lo siguiente: “Vamos a suponer que esta planta genera un problema de contaminación al agua del río. Es un tema de interés público, donde se podría intervenir, pero el Estado se compromete a compensar por lo que en realidad es un daño que está causando la propia planta”. Y Castromán contesta: “Efectivamente, es así”. Estamos en una situación de emergencia social y económica, precisamos urgentemente trabajo, pero “no a cualquier precios”, repite varias veces el diputado.
Monocultivo de eucaliptos: ¿un nuevo modelo de producción agraria?
En este momento conviene recordar que ya se está construyendo otra planta de celulosa a 12 kmt de Fray Bentos y a 5 de Botnia. Pertenece a ENCE (Empresa Nacional de Celulosa de España), cuya inversión y producción de celulosa serán aproximadamente la mitad del volumen comprometido en el proyecto de Botnia. La empresa Ence posee ya en la ribera oeste del río Uruguay una propia terminal logística denominada M’Bopicuá.
Esto quiere decir que los efectos ambientales de la planta celulosa Botnia se amplificarán con los efectos causados por la planta de ENCE. Aún en la suposición que las previsibles graves contaminaciones ambientales no se den, queda en pie que por el hecho mismo de que estas plantas de celulosa existan, se promueve y se agiganta el monocultivo de eucaliptus. Ya en 1995, cuando todavía no se hablaba de Botnia ni de Ence, la Red Uruguaya de ONGs Ambientalistas reafirmaban a la Dirección de Recursos Naturales del MGAP su crítica a la política de forestación. Pedían al Ministerio hiciera estudios serios sobre los siguientes impactos de la forestación sobre: a) el suelo, b) el régimen hidrológico, c) la flora nativa, d) la fauna nativa. Impactos que han sido comprobados en muchísimos países. [4]
En ese entonces tanto Botnia y Ence estaban en plena plantación masiva de eucalyptus para sus futuras plantas de celulosa. A través de su subsidiaria Forestal Oriental el Grupo Botnia cuenta con casi 100.000 hectáreas de plantaciones de “genética superior”. La meta es que el 60% de la madera empleada por Botnia provenga de su propia producción.[11] ENCE por su parte explota unas 50.000 hectáreas en Río Negro y Soriano.[7] Según Carlos Faroppa, asesor de Botnia, ambas plantas consumirán 5 millones de metros cúbicos por año y la capacidad instalada es de 8 millones y sigue creciendo.[11] Es decir, el monocultivo de eucalyptus se acrecienta en forma acelerada.
Chacareros de la zona denunciaron que por el monocultivo de eucaliptos el agua comenzó a escasear ya por 1995. Además detectaron otros impactos negativos: concentración de la tierra en pocas manos y extranjerización; tierras aptas para otros cultivos fueron forestadas; plagas que afectan a animales domésticos, cultivos y seres humanos; incendios; injusticia impositiva y desparece más mano de obra de la que generan.[6]
Todo el mundo conoce las condiciones de semi-esclavitud en que viven los trabajadores en estas empresas forestales. Un dato no menor, la Forestal Oriental o sus subsidiarias prohíben la sindicalización de sus trabajadores.[13]
¿Abandona Uruguay su Marca internacional de País Natural?
Uruguay sigue promocionándose en el exterior como País Natural. La contaminación que generarán estas dos plantas de celulosa atentará contra esta condición de país natural. La producción apícola, por ejemplo, con su cotizada miel ecológica, se verá afectada directamente por la contaminación aérea Alemania, importador muy importante de miel uruguaya prohíbe –según se dice- la importación de miel elaborada en un área de 100 kilómetros a la redonda de este tipo de plantas.[1] Otros productos ecológicos seguirán la misma suerte.
¿Negocio para quién?
¿Para Uruguay? Algunos piensan que ante una oferta de inversión de 1.100 millones de dólares hay que decir sí o sí, y cerrar los ojos. Pero equivocan sus números. De esos 1.100 millones solamente 200 millones se invertirán en el Uruguay. Los otros millones van directamente a Finlandia y Suecia, por la compra de maquinarias y otros servicios.[11] ¿Nuevos empleos? Según la misma empresa, una vez puesta en marcha la planta necesitará solamente 300 trabajadores Siendo una cifra dada por la empresa hay que tomarla como el número máximo de nuevos empleos. De los cuales, según la empresa, solo ocho podrán ser contratados con solo primaria completa. A los otros se les exigirá capacitación técnica. Muchos de ellos vendrán del exterior. Se orgullece la empresa diciendo que no más de ocho operarios monitoreando los paneles de control bastan para mantener en funcionamiento toda la planta.[14] Por otra parte, se calcula que se van a perder unos 1.500 trabajos en la pesca, la apicultura, el turismo y otras actividades afectadas directamente por la contaminación acústica, del agua y del aire producida por la planta.[8][10] ¿Empleos mientras se construye la planta? Sí, pan para hoy hambre para mañana. Además estos trabajadores temporales distorsionarán en gran medida durante ese corto tiempo el normal funcionamiento de la ciudad de Fray Bentos.
¿Negocio para aquellas empresas forestales que no son de Bosnia o de Ence? Para ellas poco o nada va cambiar. En vez de exportar los troncos de eucalyptus los venderán a las plantas, probablemente a un precio menor. ¿Negocio para los transportistas? Con o sin fábricas de celulosa los troncos tienen que ser transportados. ¿Negocio portuario? Ninguno, pues la terminal es de la empresa y en régimen de zona franca.
El negocio es de punta a punta del Grupo Botnia. Compra tierra a menor precio y produce eucalyptus dos veces más rápidamente que en Finlandia, Además, los trabajadores forestales son los peores remunerados en el campo y sin medidas de seguridad y condiciones de vida razonables. Esta multimillonaria empresa por otra parte está exonerada de todos los impuestos y de las tarifas aduaneras para importar y exportar. Además dispondrán gratis de ingente cantidad de agua, de carreteras y puentes construidos con el dinero de los uruguayos etc.
En un reciente artículo publicado en un medio de prensa finlandés en Internet se señala que “El director ejecutivo de Metsä.Botnia -empresa que tiene el 51% de las acciones del Grupo Botnia- confía en que la planta sea muy competitiva; en comparación con las fábricas de celulosa modernas de Finlandia, los costos de producción estimados serían alrededor de la mitad”.[11]
El químico argentino Luis Grianta expresaba: “estamos presenciando algo monstruoso que es la instalación de las dos plantas de celulosa en Fray Bentos (…) qué estudios se puedan hacer a estos sinvergüenzas que los sacan de Europa por contaminadores y que vienen con plata para corromper a cuanto organismo o cuanto legislador o gente se les ponga en el camino”[12]
Un escándalo a todo color
Algo produce escándalo cuando hiere gravemente el sentido común y las convicciones profundas de una población. ¿De que otra manera podemos nombrar el impacto que produce en los uruguayos cuando nos vamos enterando de este gran negocio de Botnia y de los males que traerá al país? No solamente los directos producidos por el funcionamiento de la planta sino también porque promueve el monocultivo del eucalyptus, la producción que menos manos de obra ocupa, la más chupadora de agua, secando napas y afluentes, de intenso uso de pesticidas y generadora de plagas varias. Todos sabemos además que el Norte rico está llevando todas sus industrias contaminantes al Sur.[13]
Por ahora el gobierno y los medios masivos han logrado que Botnia no exista para la población uruguaya. Muy recientemente el semanario Brecha ha roto valientemente este silencio. Un centenar de organizaciones ambientalistas y sociales del Litoral, uruguayas y argentinas, se están movilizando y haciendo oír su voz. Esperemos que se convierta en un inmenso clamor, que golpee los oídos y el corazón del gobierno uruguayo.
Notas
1. Sergio Israel, "Visiones del desarrollo", Brecha, 24-03-05, p. 11-12
2. Carlos Amorín, "¿Quién necesita a Botnia?", Brecha, 24-03-05, p. 13
3. Carlos Pérez Arrarte, "¿Cuánto valor agregado suman a la vida nacional?" Brecha, 24-03-05, p.14
4. ONGs reafirman su crítica a la política de forestación. Revista del Sur, Nº 49, 1995
5. Entrevistas de José Irazábal a los diputados Ricardo Castromán y Ruben Carminatti. Radio el Espectador, 6-05-04
6. Carta de los chacareros de Camino SADAM, Cerro Alegre, Ruta 14 y Paraje Pense, Comunicado de Prensa del Grupo Guayubirá, Mercedes, 7 de octubre de 2004
7. Pablo Alfano, "Intenciones de Papel", Brecha, 28-01-05
8. Inversión de Botnia no será lo anunciado. Montevideo COMM/Portal, 09-03-05
9. "Botnia: ¿quién beneficia a quién?", Grupo Guayubira, Comunicado de prensa, 28-03-05
10. Carta Abierta a la empresa Botnia sobre forestación y plantas de celulosa, firmada por 24 organizaciones sociales de Uruguay y Argentina, Montevideo, 4 de junio 2004.
11. Entrevista de E.Cotelo a Carlos Faroppa, asesor de Botnia, Radio El Espectador, 8-03-05
12. Entrevista de José Luis Vázquez a Don Luis Grianta, químico argentino, CX 36 Radio Centenario, 26-03-05
13. Comcosur al Día, 29-03-05. "Fábricas de celulosa: Presidente Vázquez no recibió a Gobernador de Entre Ríos" y "Desastre en Valdivia", Chile.
Artículo publicado en el mensuario "Sol y Luna" Nº 84, abril/mayo de 2005.

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