Tratan gastritis en Cuba con medicamento celulosa del bagazo

Tratan gastritis en Cuba con medicamento celulosa del bagazo

Roberto Salomón
La Habana, 21 oct (PL) El uso de celulosa microcristalina en el tratamiento de gastritis alcalina, es uno de los logros de la Unión de Investigación-Producción de la Celulosa del Bagazo Cuba-9, aseguró hoy Alejandro Abril, subdirector de ese centro.
En declaraciones a Prensa Latina, Abril precisó que existe un trabajo conjunto con el Hospital Nacional, en esta capital, para la validación de ese producto en la terapéutica de esa dolencia.

El experto aseguró que hay resultados muy importantes sobre las cualidades curativas de ese derivado de la celulosa, que van a permitir que todos los enfermos de gastritis alcalina en el país puedan beneficiarse del medicamento.

Fundado hace más de 25 años con financiamiento del Gobierno y del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, Cuba 9 exhibe además un antidiarreico para cerdos, placas filtrantes para la industria de bebidas y licores, y potabilizar agua.

También se encuentran entre sus logros científico- técnicos diversos tipos de papeles y cartulinas y piensos elaborados a partir de bagacillo.

Abril dio a conocer que realizan estudios para desarrollar novedosas tecnologías que permitan obtener etanol (alcohol de caña de azúcar) a partir de residuos lignocelulósicos.

Este es un tema muy interesante para Cuba, una gran oportunidad por la abundancia de bagazo y paja de ese cultivo, señaló.

Se trata de una tecnología de punta en el mundo, a cuya investigación se dedican millones de dólares, y la cual aún no está a nivel industrial, pero se espera que en dos o tres años existan plantas comerciales para producir etanol por esa vía.

Ese alcohol cobra gran interés como aditivo para sustituir el tetraetilo de plomo de la gasolina, que es contaminante, aseveró Abril, quien expuso un trabajo en el X Congreso Internacional sobre Azúcar y Derivados.

La única solución aceptable para la producción de etanol es a partir de estos residuos, aseguró el especialista.

Argumentó que la tendencia actual de utilizar granos, maíz y otros cultivos con ese fin es inaceptable desde el punto de vista ético, porque, en definitiva, no es más que convertir alimentos en combustibles para los automóviles.

Además, existen fuertes evidencias que ello influye a favor del encarecimiento de los nutrientes, comentó.

El experto destacó la calidad y diversidad de los temas tratados en Diversificación 2008, que sesionó en el Hotel Nacional, con la participación de especialistas de 25 naciones incluida Cuba.

También indicó que las líneas de trabajo de Cuba-9 siguen relacionadas con la celulosa del bagazo, pero con un enfoque más abierto, que aproveche esa fibra para confeccionar tableros y otros derivados con fines de alimentación y salud.

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