7.31% DEL PRESUPUESTO NACIONAL VA PARA LOS YERBAS

MÁS MILICOS PER CÁPITA QUE COLOMBIA

En 2008 gastaremos en Defensa casi 317 millones de
dólares

TENEMOS EN PROPORCIÓN LAS FUERZAS ARMADAS MÁS NUMEROSAS DE LA REGIÓN

Luis Casal Beck (Caras y Caretas)

Uruguay posee las fuerzas armadas más numerosas de la región en relación
a su población, revela el Atlas comparativo de la defensa 2008,
presentado este miércoles I de octubre por la Red de Seguridad y Defensa
de América Latina (Resdal) en el Instituto Militar de Estudios Superiores
(IMES) de Montevideo.

El Atlas Resdal indica que nuestras fuerzas armadas están integradas por
24.621 efectivos del Ejército (16.234), 5.403 de la Armada y 2.948 de la
Fuerza Aérea. El presupuesto del Estado uruguayo destinado a la defensa
fue cuantificado en el año en curso en casi 317 millones de dólares. En
el cálculo, los expertos de Resdal incluyeron US$ 24.138.577 que se
emplearon en la asistencia financiera a la Caja Militar.

Nuestro país gasta en asuntos militares el 7,31% de su presupuesto anual,
ubicándose en noveno lugar en la región, y el 1,19% de su Producto Bruto
Interno (PBI), lo que lo sitúa en cuarto lugar en el estudio que
comprende a 16 países

En la actualidad suman 2.595 los militares uruguayos asignados a misiones
de paz de Naciones Unidas: 1.323 en el Congo y 1.171 en Haití. Estas
cifras vuelven a colocar a Uruguay en primer lugar en términos
regionales: se trata del 40,89 % de la presencia castrense
latinoamericana.

El Atlas Resdal, de 311 páginas y presentado en tres idiomas (inglés,
francés y castellano), señala que las fuerzas armadas de Brasil están
representadas en estos contingentes de cascos azules por 1.264 hombres
(19,91% del total) y la Argentina por 862 (13,58%).

En 11 de los 16 países analizados sigue vigente un servicio militar
obligatorio de su población. Este mecanismo impera en Bolivia, Brasil,
Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, Guatemala, México, Paraguay,
República Dominicana y Venezuela. El personal castrense es voluntario y
contratado en Argentina, Perú, Uruguay, Nicaragua y Honduras.

El académico argentino Gonzalo Serra (28), uno de los investigadores que
elaboró este atlas, dijo a CARASyCARETAS que la tendencia dominante se
orienta al desarrollo de fuerzas armadas "contratadas y
profesionales". Esto es lo que ocurrió en su país, Argentina, donde
las tres ramas castrenses poseen en la actualidad 71.418 hombres,
situándose en quinto lugar en términos regionales.

Uruguay encabeza la lista de los 16 países estudiados "en cantidad
de efectivos militares cada 10.000 habitantes", según los datos de
población tomados del Anuario estadístico de América Latina y el Caribe
de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) de Naciones Unidas,
proyectados a 2008. En segundo y tercer lugar se ubican Colombia y
Venezuela. La socióloga peruana Ivette Castañeda (25), que participó en
la investigación, comentó a CARASyCARETAS que "hay que tener en
cuenta el estancamiento demográfico de Uruguay y el alto porcentaje de la
población de este país que trabaja en el Estado. Lo militar no puede ser
una excepción .

El Ejército local tiene 1.670 oficiales, 1.941 suboficiales y 12.623
integrantes del personal de tropa. La Armada cuenta con 730 oficiales,
405 suboficiales y 4.268 marineros.
La aeronáutica militar tiene 533 oficiales, 253 suboficiales y 2.198
subalternos. En total suman 2.933 oficiales, 2.149 suboficiales y 19.089
personas que integran el personal calificado como "de
tropa".

En 1985, al volver el país a un régimen democrático, revistaban en las
fuerzas armadas casi 30 mil efectivos. El Ejército poseía 21.557, la
Armada 4.761 y la Fuerza Aérea 3.521.

Las fuerzas armadas más numerosas de la región, según el Atlas Resdal
2008, son las de Brasil (334.743 hombres), seguidas por las de Colombia
(310.567), México (248.141), Venezuela (163.364), Perú (84.983),
Argentina (71.418) y Chile (70.917).

Los países que destinan partidas más altas de sus presupuestos en el área
de defensa son Ecuador (3,41%), Colombia (2,97%), Chile (2,63%) y Brasil
(l,62%). Más rezagados están Venezuela (1%) y Argentina (0,81%).

Cuando se les preguntó acerca de la existencia de una carrera
armamentista en Latinoamérica, tanto Serra como Castañedo negaron este
extremo. Los dos investigadores, que residen en la sede de Resdal en
Buenos Aires, dijeron que lo que se observa es una "renovación de
material castrense en sustitución de otro, considerado en general
obsoleto".

En el caso chileno resaltaron la vigencia de una Ley del Cobre que ha
permitido destinar importantes recursos a la compra de blindados, navíos
de guerra y aviones de última generación. Castañedo comentó que en Perú
se busca un mecanismo similar con "un canon minero".

Serra, que es graduado de la Universidad Torcuato Di Telia de la capital
argentina, dijo que más que tensiones se nota en la región un clima de
desarrollo de la "confianza mutua. Por eso es que no podemos hablar
de una carrera armamentista, con tensiones y sospechas entre los
países".
Ambos investigadores consideran que el atlas es un instrumento que busca
avanzar en el conocimiento de la problemática de la defensa, contribuir
en el control democrático real de las fuerzas armadas y fortalecer los
elencos civiles que tienen que tener un papel gravitante en los
ministerios de Defensa de cada país. "Falta mucho aún",
reflexionó Castañeda, formada en la Universidad Católica de
Lima.

La actual edición del atlas comparativo Resdal fue presentada
originalmente en la VIII Conferencia de Ministros de Defensa de las
Américas, realizada en Banff, Canadá, el pasado 3 de setiembre. Su
prólogo está firmado por Marcela Dona-dio y Paz Tibiletti, directoras del
proyecto. A lo largo de 25 capítulos, la obra aborda cuestiones generales
referidos a la defensa y a la situación específica de dieciséis
países.

Entre otros ítems se analiza el desarrollo de las relaciones
cívico-militares en el siglo XXI, los procesos de modernización, el marco
legal y los presupuestos, el papel de los parlamentos, cómo encarar una
educación democrática para la defensa. Entre los autores figuran los
politólogos uruguayos Juan Rial, que reside en Estados Unidos, y Félix
Besio.

El capítulo sobre Uruguay se extiende entre las páginas 280 y 288. Al
examinar el presupuesto de defensa 2008 de Uruguay el atlas afirma que el
73,85% se destina al gasto en personal, que incluye los retirados
militares y el pago de las pensiones. Dentro de los incisos del
Ministerio de Defensa Nacional las partidas principales se vuelcan al
Ejército ($ 2.174.781.000), la Armada ($ 1.089.083.000), la Fuerza Aérea
($ 687.193.000) y Sanidad Militar ($ 604.879.000). La transferencia
financiera a la Caja Militar asciende a $ 1.715.927.000.

Al exponer la realidad de la cartera de Defensa, surgida en 1935, la
publicación afirma que a lo largo de la historia Veinte civiles y quince
militares estuvieron al frente de este ministerio. Recuerda que la única
mujer fue la abogada socialista Azucena Berruti (2005-2008). La
permanencia promedio en el cargo de titular de la defensa ha sido en
Uruguay de dos años y un mes.

En cuanto a los centros básicos de formación de oficiales, indica que en
2008 ingresaron a la Escuela Militar 85 alumnos, 44 a la Escuela Naval y
36 a la Escuela Militar de Aeronáutica.

Al describir la realidad de la tres fuerzas armadas locales, el Atlas
Resdal afirma que de los 24.621 militares, 16.234 -es decir, el 66%-
pertenecen al Ejército, 5.403 (22%) a la marina de' guerra y 2.984 (12%)
a la aeronáutica militar.

Resdal surgió en 2001 "con la misión de promover la
institucionalización de las funciones estatales de seguridad y defensa,
en el marco de la democracia en América Latina, mediante el
fortalecimiento de las capacidades civiles", dice uno de sus
documentos centrales.

Además del atlas comparativo desarrolla programas sobre transparencia y
calidad en los presupuestos de defensa, la problemática de la conducción
civil de los ministerios de defensa y la acción de los parlamentos en
cuestiones referidas a las fuerzas armadas. Es dirigida por una junta de
21 miembros de varios países y tiene una secretaría ejecutiva en Buenos
Aires
(www.resdal.org.ar).