Arana, Bengoa y la Constitución

Arana, Bengoa y la Constitución



El final de la feria judicial traerá consigo la continuación de algunas historietas del año pasado. Uno de los temas será, sin dudas, el caso Bengoa.
A propósito de las implicancias que puede tener el ex intendente Mariano Arana, quien fuera su Secretaria General, Maria Julia Muñoz, y Alberto Roselli, se pueden hacer unas primeras y necesarias puntualizaciones.

Primero, que como ya se ha dicho acá, es imposible invertir las responsabilidades que jerárquicamente les corresponden a los que están arriba en un escalafón, x sobre los que están debajo -como pretenden hacer estos jerarcas que en todo momento han declarado sentirse desagradablemente sorprendidos x el caso de los Casinos Municipales, la honestidad de estos negocios, y hasta su incumbencia: el propio Arana ha dicho algo así como que había designado a Bengoa en su puesto en base a los conocimientos que tenía este contador de lo que hacía, y que para eso lo ponía. (Como para no tener que andar enterándose él, supongo yo, dándole, claro, mi lectura a lo que dijo xque no se me ocurre qué otra lectura se le puede dar).

Segundo y tremendamente importante, repasar la Constitución de la República que dice que “corresponde al Intendente las funciones ejecutivas y administrativas en el Gobierno Departamental”. Que debe “cumplir y hacer cumplir la Constitución y las Leyes”. Que tiene que “nombrar los empleados de su dependencia, corregirlos y suspenderlos. Destituirlos en caso de ineptitud, omisión o delito, con autorización de la Junta Departamental”. Que corresponde “al Intendente representar al departamento en sus relaciones con los Poderes del Estado o con los demás Gobiernos departamentales, y en sus contratos con órganos oficiales o PRIVADOS” (la mayúscula es mía).

Tendría también que recordar Arana, ya que estuvo lo suficiente como para hacérsele patente, que “LOS DIRECTORES GENERALES DE DEPARTAMENTO EJERCERÁN LOS COMETIDOS QUE EL INTENDENTE EXPRESAMENTE DELEGUE EN ELLOS” (obviamente acá también la mayúscula la puse eu).
Debería Arana (y el resto de los funcionarios) repasar la Constitución, en vez de andar siempre con unos papeles que no se sabe que son; o sin nada encima, como se lo ve con frecuencia públicamente.
Saben los secretarios generales los lazos que los unen con sus Intendentes. Eso también está en la Constitución. Lo saben los Intendentes suplentes. Saben a su vez, estas personas, que la Junta Departamental tiene como función principal ejercer CONTROL sobre el Gobierno Municipal. Saben que el Tribunal de Cuentas debe OBSERVAR, y que dichas observaciones deben considerarse, así como las que oportunamente pueda hacer la Junta.

El tema de los Casinos arrancó x el 2003, con un gobierno municipal frenteamplista de 15 años, los dos últimos en carácter de reelección, como también consigna la Carta Magna. También se sabe que la junta era mayoritariamente oficialista. Las observaciones a estos negocios y la administración de los mismos ya había sido realizada x el Tribunal... Pues bien, que yo sepa, los negocios se mantienen y creo que ni las empresas adjudicatarias han sufrido revocación alguna de sus contratos. Que yo sepa.

Que yo sepa, todavía hay algunos boliches pulguientos x Montevideo que supieron tener y tienen, inexplicablemente, en medio de su miseria de barrio, una extraña, moderna y colorinchuda maquinita tragamonedas que mira solitaria su triste entorno con la boca bien abierta esperando alguna monedita. Y también hay un tipo acodado sobre el mostrador de mármol tomándose una grapita que de costado la relojea.
Que yo sepa.